A los padres les preocupa la salud de sus hijos, quieren asegurarse de que estén bien, que no les haga falta nada y que no sufran. A medida que los van conociendo, se enfrentan a la incertidumbre de no saber si su hijo está llorando por hambre, sueño o algún malestar desconocido.
En muchos casos los problemas digestivos comunes en los niños pueden ser una de las razones por las cuales los pequeños se sienten incómodos o alterados, pero estos malestares a veces son difíciles de identificar a simple vista. ¿Cómo saber que los niños están llorando porque tienen problemas digestivos? o ¿Cómo reconocer los síntomas?
A continuación, daremos a conocer algunas de las posibles causas, síntomas y soluciones más efectivas para aliviar estos inconvenientes y asegurar el bienestar de los niños y la tranquilidad de sus padres.
Los problemas digestivos en niños se deben principalmente a que cuando nacen, el sistema digestivo de los pequeños está en un proceso de adaptación fuera del útero, ya que los recién nacidos tienen un sistema gastrointestinal en proceso de desarrollo, lo que lleva a que los niños experimenten síntomas de regurgitación, gases, estreñimiento y cólicos.
Algunos niños, pueden tener trastornos de interacción intestino-cerebro (TIIC), relacionado con un desequilibrio en la microbiota intestinal y que se caracterizará por una menor diversidad y cantidad de microorganismos beneficiosos como bifidobacterias y lactobacilos. Es este desequilibrio el que puede influir en la salud digestiva de los pequeños y contribuir a condiciones como cólicos infantiles, impactando en la calidad de vida tanto del niño como la de su familia.
Es importante proteger y cuidar la microbiota intestinal de los niños, ya que cumple múltiples funciones de protección, refuerza el sistema inmune y absorbe nutrientes. El desequilibrio de la microbiota intestinal podría inducir gases e inflamación intestinal, contribuyendo a que los pequeños tengan cólicos.
Y aunque a medida que los niños van creciendo estos problemas suelen disminuir, ya que su sistema gastrointestinal va madurando; es importante reconocer algunos síntomas que indicarán que el pequeño tiene problemas digestivos.
Es importante que al reconocer alguno de los siguientes síntomas se cuente con apoyo de un médico profesional. Durante las primeras semanas o meses de vida de los niños, los padres deben estar muy atentos a cualquier síntoma o signo de alerta que pueda ser visible para poder tratar los problemas digestivos en los pequeños a tiempo, esto ayudará a que el niño se sienta más cómodo y que los padres no estén tan preocupados.
Los síntomas más comunes de problemas digestivos pueden ser:
Se debe tener en cuenta que existen varias soluciones y vías para enfrentar los problemas digestivos en pequeños, sin embargo, es necesario consultar al médico o pediatra del niño para asegurarse de cuáles podrían ser las mejores estrategias que se deben implementar para mejorar la salud digestiva del pequeño. De igual manera, como familia se pueden implementar una serie de recomendaciones para poder enfrentar estos problemas digestivos y que el niño no experimente incomodidades o dolores:
Es importante tener presente que los problemas digestivos en niños son muy comunes dentro de las primeras semanas o meses de vida y que a medida que el pequeño vaya creciendo, irá mejorando. Recuerda estar siempre pendiente de los diferentes síntomas que puede presentar el niño para poder realizar acciones tempranas y evitar condiciones graves durante su etapa de crecimiento.
Conoce más sobre cómo cuidar a los niños en otros artículos de blog, para asegurarse que están recibiendo todos los nutrientes esenciales para un óptimo desarrollo y crecimiento.
AVISO IMPORTANTE: La leche materna es el mejor alimento para el lactante y debe ser exclusiva durante los primeros 6 meses de vida para lograr todos los beneficios nutricionales e inmunológicos del lactante. Sin embargo, posterior a los 6 meses de vida, también se recomienda la lactancia materna durante el mayor tiempo posible. Una buena alimentación de la madre es importante para la preparación y mantenimiento de la lactancia materna, así como la preparación física y psicológica. Introducir alimentación parcial o total con biberón incide negativamente en la calidad y cantidad de la lactancia materna y reversar la decisión de no amamantar es difícil. Las implicaciones sociales y financieras de la alimentación con fórmula deben tenerse en cuenta cuando se decide utilizar este método de alimentación. Cualquier uso inapropiado o innecesario de las fórmulas infantiles puede conllevar a riesgo en la salud. Material con fines informativos para padres y/o cuidadores.